martes, 5 de abril de 2011

El PP desprecia y persigue la libertad de información, amedréntandola

Escrito por: luisasa el 05 Abr 2011En Diario de Una periodista en paro
Hoy también voy a hablarles del PP, lo pongo por delante, así que no se llamen a engaño. He llegado a la conclusión de que la insistencia en hacerlos tema de estos posteos no se debe a una fijación mía, sino más bien a que no paran de sorprendernos, de decir, de hacer, de dejar de hacer, de molestar, de enojar al prójimo de continuo, de provocar, en fin... estoy segura de que me entienden. Además, esta vez, porque tiene que ver con la profesión de esta escribidora silenciada, el periodismo. Y voy a hacerlo otra vez asimismo por que veamos cómo se las gasta este partido, respecto del que, y por el bien de todos nosotros, sinceramente espero que no llegue a la Moncloa hasta dentro de treinta o de cuarenta años, allá para cuando sus integrantes se hayan homologado con sus correligionarios europeos.
La noticia a la que voy a hacer referencia la leí en el blog de Rosa María Artal, quien, por cierto, ruega que difundamos la fotografía que ilustra este posteo y que ha sido la causa del despido fulminante del director del Xornal de Galicia, José Luis Gómez, por haber publicado esa misma imagen en la que el Presidente del PP, Mariano Raxoi Brey, aparece en el atunero de una familia de narcotraficantes “con solera”, Os caneos, cuyo jefe, el del clan, Daniel Baúlo Carballo, está detenido y es considerado por la policía, según expone Artal, “como el más peligroso de los traficantes de nuestro país”.
La reacción del líder del PP -que aún hoy mismo, en unas declaraciones a la SER, afirmaba que sigue considerando a Camps "un hombre honrado”, lo que, dadas las relaciones que tiene este otro caballero, puede que hasta lo haya dicho convencido, ya que uno tiende a ser benevolente consigo mismo- no fue la de pedir excusas o dar explicaciones por mantener unas relaciones tan perversas como peligrosas y en especial en un político, como hubiera hecho cualquier homólogo europeo pillado en semejante trance; no y de ninguna manera. La reacción del señor Raxoi Brey fue, por el contrario, la de montar en cólera y, siempre siguiendo a Rosa María Artal en su blog, quien a su vez tomó la noticia de “Galicia Confidencial”, llamar al propietario del Xornal de Galicia, a la vez que de la constructora San José, para decirle que, “como presidirá el Gobierno en breve, lo que significa tener el poder para continuar adjudicando o no las obras públicas de las principales empresas españolas, entre ellas, por supuesto, la constructora San José”... usted mismo, vaya, es de suponer. Vino a sugerir, pues, que “no era conveniente enemistarse con él”, exigiendo así el despido del periodista que publicó tan comprometedora fotografía. Para Raxoi el compromiso pero, recuerden, estos individuos del PP tienen extrañas percepciones de la realidad.
El despido de José Luis Gómez, disfrazado de “cese por mutuo acuerdo”, fue fulminante tras la conversación mantenida entre el propietario de Xornal de Galicia y el líder del PP, a quien precisa y justamente habría que haber expulsado de la vida política por frecuentar amistades así de indeseables, nada menos que gente del narcotráfico de lo más selecto. Pero, ya saben ustedes que en este país en el que la prensa no es ni mucho menos aquello que dio en llamarse en el siglo XX, primero en USA y luego en todo el mundo, "cuarto poder”, cuando se descubre el mal proceder de un político y se publica, así cumpliendo el periodista con su labor, no supone, como pasa en los países civilizados, que ese político sea expulsado de su cargo, sino que la repercusión y las consecuencias las pagan los infelices que creen en la libertad de expresión, el derecho y la obligación de informar a la ciudadanía de las tropelías, los abusos o las relaciones curiosísimas que tienen algunos de nuestros políticos.
Si el señor Raxoi –por así decirlo, porque si hasta ahora me había parecido un hombre de paja de Aznar sin carácter o uno de sus secuaces, con este asunto ha pasado en mi consideración a la categoría de miserable sin más- comete estos abusos de poder, estos métodos de censura propios del franquismo, estos chantajes con los dueños de los medios, este proceder más propio de un capo mafioso, estando en la oposición, ¿se imaginan qué no será capaz de hacer si somos tan suicidas como para permitirle llegar a la Moncloa?
La situación que vive la prensa allá donde gobierna el PP, y la que vivirá en todo el Estado si estos hijos de Torquemada llegan al poder, es, reconozcámoslo, en gran parte por culpa del colectivo periodístico, aquejado de una absoluta carencia de solidaridad y de sentido corporativo de la profesión en el mejor sentido de la palabra. Si cuando los políticos de todos los partidos y de todo jaez comenzaron a imponer esa modalidad de censura que son las "ruedas de prensa sin preguntas" que tan de moda están por impuestas, los profesionales que acuden a ellas abandonaran las grabadoras sobre la mesa, se dieran media vuelta, e hicieran, entre otras posibilidades, como yo hace unos años, decirle a un conseller "la próxima vez, por favor, háganme llegar el comunicado y las fotos por Internet a mi correo, no tengo tiempo ni ganas de venir a hacer bulto a una rueda de prensa como convidada de piedra”, otra sería la actitud prepotente de los políticos y, así, esa estúpida, por censora, modalidad, se habría acabado en dos días, de paso que algunos, contaditos, no habríamos sido silenciados. De la misma manera que se acabarían de una vez por todas las presiones, la chulería y los despidos de las empresas sumisas al chantaje de la publicidad o de cualquier otro tipo de contratos al dictado de los políticos, si los periodistas, conscientes de su importancia, decidieran callar unos días. Ni prensa escrita, ni radio, ni informativos televisivos, nada, ni siquiera blogs. Una condena al silencio y al ostracismo a todos los políticos que, aunque a día de hoy creen ser los amos, serían entonces, sin forma de aparecer en los medios, menos que nada, sencillamente no existirían, y entonces los editores se llevarían las manos a la cabeza, porque de nada les valdría tener determinada publicidad contratada con el poder. ¿Dónde iban a insertar esa publicidad? ¿En unos medios en los que no se diera ninguna información, en blanco?
Es urgente y necesario, y no solo por el bien de la clase periodística, sino también y mucho por la democracia de este país de países, recuperar la dignidad, dejar de tener miedo al poder, que cuando un editor se permita despedir a un colega por haberse limitado a dar fe de la verdad de cuanto ocurre, por mucho que hayan amenazado los políticos de turno y por poderosos que parezcan, se planten todos cuantos periodistas tienen trabajo aún, dejando de informar, condenando al ostracismo unos cuantos días como protesta y defensa, hoy por ti, mañana por mí, pero siempre por la prensa libre. Ya verían cómo se cortaban los despidos, las presiones y los chantajes.
En esta ocasión fue el eterno candidato Raxoi Brey. Me atrevo a sugerirle a algún colega en activo que la próxima vez que dé una rueda de prensa, con o sin preguntas, inquiera al líder del PP si cree en la libertad de expresión. Me juego, no ya el teclado de mi portátil, sino mi vida misma, a que responderá “por supuesto”, que entonces le espete: “Y siendo así, ¿por qué ha forzado el despido de un periodista por haber mostrado una foto suya en el barco de un narcotraficante? ¿No debiera haber sido usted quien tendría que haber sido expulsado de la política?”. Mucho me temo que estoy haciendo periodismo ficción y que Raxoi y el PP entero seguirá mangoneando a cuanto medio de comunicación existe para que no se cuente lo que a ellos no les gusta. En vista de todo lo cual, piensen en la calidad de información que llegaremos a tener si el PP gana las elecciones… Y, si no lo creen, sintonicen, por favor, Canal NO-DO, la televisión valenciana. Es el paradigma de qué clase de medios y de profesionales quiere el PP. Ah, pero después, mis queridos colegas en activo, no escribáis quejándoos de lo que hay, porque habrá lo que entre todos vosotros permitisteis con vuestra complicidad. Siempre ha sido así.


No hay comentarios:

Publicar un comentario